viernes, 1 de febrero de 2013

CALI, CIUDAD PANÓPTICA

La ciudad de Cali pasa por una de sus peores administraciones, en la actualidad el gobierno de Rodrigo Guerrero sólo le ha apostado al control, la vigilancia y el castigo, para mantenerse intacto en el poder y crear una falsa caleñidad.  Ya nada queda de su campaña política, la cual movilizó muchos jóvenes y  algunos sectores culturales que con alegría, esperanza y pañuelos en la cabeza anunciaban un nuevo aire de prosperidad para la ciudad. ¡Pero claro, estaba en campaña! Y elite es elite…

Ahora bien, la estrategia de este gobierno es la vigilar y castigar. La ciudad se encuentra inundada de foto-multas, retenes, agentes de tránsito tomando fotos, controles y garitas policiales, que pretenden –Sin con éxito- disciplinar a los caleños  por medio de cámaras, entendiendo éste como un dispositivo de “poder” que permite ver sin ser visto.

Es que pareciera que este gobierno sólo le apuesta a un cultura del miedo, campañas cívicas televisivas como la del Vivo Bobo, tan exitosa años atrás, ahora se enfoca únicamente a conductores y normas de tránsito que poco o nada le aportan a una verdadera convivencia y cultura ciudadana.  Han priorizado entonces el castigo y las cuantiosas sanciones económicas que a aquellos programas de acompañamiento educativo y cultural que inculquen valores, normas, y respeto a la vida que ayuden a tomar conciencia del papel del individuo en su entorno social.

 Esto era de esperarse, desde una visión reduccionista de costo-beneficio es más importante la sanción económica y sus dividendos que la apuesta cultural y sus transformaciones, así pues, entre el 2011 y el 2012 la Secretaria de Tránsito y transporte logró recaudar por concepto de multas y comparendos 17.476 millones de pesos, cuando en el 2010 se alcanzó un poco más de la mitad. 


En consecuencia, la vigilancia panóptica que se establece en cámaras de foto-multas y en agentes transito con cámaras fotográficas que buscan en cada rincón de la ciudad algún ciudadano “rebelde” que incumpla la norma es realmente productivo y rentable para el Municipio, pero lamentablemente esta estrategia para recaudar  dinero  no se ve reflejada en el mejoramiento de la cultura de sus ciudadanos  ni mucho menos  en el mejoramiento de la malla vial.


 * Imágenes: http://www.cali.gov.co
http://www.elpais.com.co